Voluntariado Pedro Arrupe 2016-2017
En este centro, como bien sabemos, tenemos la gran oportunidad de complementar nuestra formación académica desde una perspectiva más humanizadora y cívica. Para ello, contamos con la posibilidad de participar en diversos voluntariados. Por este mismo motivo, al inicio de curso se realizó una reunión en el Salón de Actos del centro, con el objetivo de fomentar el espíritu voluntario de los nuevos alumnos de magisterio e informarles de los diferentes voluntariados. La reunión se desarrolló de la siguiente manera; en primer lugar, se les dio a los alumnos unas nociones sobre lo que significa ser voluntario; seguidamente, algunas compañeras contaron su experiencia sobre un tipo voluntariado más específico como Paraguay, Burgos o Sevilla. Finalmente, el coordinador de cada voluntariado junto con el alumno responsable del mismo, se marcharon a un aula en la que se les explicó a los nuevos alumnos interesados en ese voluntariado, en qué consiste, qué se hace, horarios...
Es destacable el gran número de alumnos que acudió a esta reunión y la gran acogida que tuvieron los voluntariados. Este es un hecho muy significativo en una sociedad en la que se juzga a la juventud de ser poco solidaria, con falta de valores o estar poco implicada con las personas más necesitadas. Ese jueves por la tarde, se demostró que hay mucha gente joven interesada en ayudar de forma desinteresada y voluntaria a los demás, ya sea con niños con problemas en su contexto familiar o que se encuentran en un hospital, personas con discapacidad, ancianos enfermos de alzhéimer…
Debemos animar a cada generación de alumnos que se incorpora todos los años a la Escuela Universitaria de Magisterio, a que experimenten la sensación de lo que significa ser voluntario y a qué en definitiva, desarrollen ese espíritu humanizador del que hablábamos al principio, formando alumnos entregados e integrales para y con la sociedad. Esperamos que en años próximos los voluntariados tengan la misma o mejor acogida que la de este año. Por ello y para concluir, también debemos dar las gracias a todos los alumnos voluntarios de cursos superiores, que han sido pieza importante de esta exitosa acogida.
Es destacable el gran número de alumnos que acudió a esta reunión y la gran acogida que tuvieron los voluntariados. Este es un hecho muy significativo en una sociedad en la que se juzga a la juventud de ser poco solidaria, con falta de valores o estar poco implicada con las personas más necesitadas. Ese jueves por la tarde, se demostró que hay mucha gente joven interesada en ayudar de forma desinteresada y voluntaria a los demás, ya sea con niños con problemas en su contexto familiar o que se encuentran en un hospital, personas con discapacidad, ancianos enfermos de alzhéimer…
Debemos animar a cada generación de alumnos que se incorpora todos los años a la Escuela Universitaria de Magisterio, a que experimenten la sensación de lo que significa ser voluntario y a qué en definitiva, desarrollen ese espíritu humanizador del que hablábamos al principio, formando alumnos entregados e integrales para y con la sociedad. Esperamos que en años próximos los voluntariados tengan la misma o mejor acogida que la de este año. Por ello y para concluir, también debemos dar las gracias a todos los alumnos voluntarios de cursos superiores, que han sido pieza importante de esta exitosa acogida.